jueves, 28 de junio de 2018

DISCREPANCIAS MORENA

        Bardo de la Taurina
       Arte Fco. Álvarez


 La Fiesta Brava  vive en la incertidumbre, de saber si seguirá vigente  en la capital,  lo que ha hecho que mucha gente se aleje de ella, se dice que dos son los enemigos de la tradición; los anti taurinos y los políticos que la usan como gancho al voto. La ecuación la  busca  un nicho ajeno a la cultura, a personas que  por convicción, ignorancia o esnobismo, van en contra del arte que genera arte y vamos, se entiende que exista gente que no se sensibilice a la belleza que prefiera vivir dentro de un cuarto, comer tacos de lechuga con perejil y entregar su amor a un perro.

Pero de ahí a convertirse en enemigo de quienes no comparten sus  gustos, vaya que hay un trecho grande, pero cuando sale un improvisado aspirante a hueseador llamado Sergio Mayer y sin más amenaza a los miles que viven y disfrutan de las múltiples aristas de la tauromaquia con palabras como diputado que ya se asume -Se les va acabar su ‘espectáculo’ tarde o temprano, dalo por hecho-, eso es una expresión abierta contra la libertad a la elección  de la educación cultural, pero sobretodo el estríper, para el que vivir de la carne alterada con anabólicos no le es ajeno, desde el partido del Amor y Paz  está arengando ahora, no al sexo desenfrenado como lo hace en las carpas, sino al encono social, porque todo aquello que es despojo, es enojo.

Tengo en mi mesa un libro  que encarna la figura del emblemático torero Silverio Pérez, la portada en pastas de lujo que  lleva los colores de MORENA, el prólogo lo firma en calidad de taurino el Ing. Javier Jiménez Spriu, quien ha sido futurizado ministro de la SCOP por AMLO, la dedicatoria estuvo a cargo del Dr. Higinio Martínez Miranda y la presentación la hizo la Profra. Delfina Gómez Álvarez militantes de abolengo y hoy candidatos a las cámaras, además soslayar que la obra editorial fue costeada por un gobierno morenista, ¿y quiere otra? A la Ciudad Deportiva de Texcoco recientemente se le cambio  el nombre por el de un torero vía mandato morenista.

Con todo esto queda en evidenciada la ignorancia, la falta de criterio y la discrepancia con el partido por parte de un candidato oportunista  como Sergio Mayer, quien todavía no empieza y  ya  enseño que lo de él no es la política, ni el respeto,  sino otras cosas… lo  que nos lleva a  revisar a quien le vamos a entregar nuestro voto, no vaya a ser que venga un usurpador y las casas de cultura las convierta en garitos eróticos solo para mujeres.


¡Votemos sí… por políticos profesionales!




domingo, 24 de junio de 2018

Los Sanfermines, en vivo, en libros y en charlas.



El Toro en México
Por Bardo de la Taurina
Los Sanfermines a la distancia
México es un país sensible a vibrar con las tradiciones propias y también las que se respetan y se admiran en otras latitudes de las cuales muchas nos han llegado y las hemos adoptado como la fiesta de toros, que se le reconoce en el renglón de lo popular como la fiesta más antigua aquí, que ya va pa’ una quintilla de siglos en este país, y con ello  por acá  las festividades al estilo de los Sanfermines se toman como modelo o ejemplo y es así que en diferentes épocas del año su puesta en escena se convierte en reflector de  atracción regional y turística, por citar entre ellas las que se conocen como; la Huamantlada en Tlaxcala o la San Migueleada, en Guanajuato.

Y es justo señalar que desde que  Hemingway  con sus crónicas en periódicos, revistas y  libros, avivo el chupinazo de lo que son las festividades de los Sanfermines en Pamplona, el mundo americano y en particular el mexicano empezaron a adoptar estas fiestas como unas de sus favoritas, y por ello en estos días que a través de El Imparcial y de las plataformas digitales por acá nos hemos enterado del jelengue preocupante por el que está atravesando la tradición que se realiza en Pamplona, pues la inquietud se ha apoderado en torno a que si continuará sin castración la fiesta de Los Sanfermines, con ese correr sus encierros por las calles y posteriormente las corridas de toros, y aquí permítaseme señalar que en los más recientes años por la calle de Estafeta se está volviendo una tradición ver el ahínco de la casaca tricolor que porta orgulloso y valiente el fotógrafo de las ferias españolas y director de ‘Suerte Matador’, el mexicano Emilio Méndez, lo cual quiere decir que el país azteca tiene participación en esta festividad y ese es un motivo más para ocuparnos de ella.  

A la gente interesada  en el tema  y a usted, les estamos recomendando que si no la leyó ingrese a, -elimparcial.es-,  buscando la fecha del miércoles 20 de junio del 2018, para dar con una columna que fue titulada como ´Los ganaderos advierten a Bildu: Pamplona no tendrá encierros sin corridas’ y a partir de ella irse buscando lo que está sucediendo ya en tiempo presente, y solo traer a la palestra, que lo sucedido es altamente preocupante, para esa región, para la España costumbrista y para la Fiesta Brava en México, apoyados en que aquí  cabe muy bien ese refrán de ‘Cuando veas las barbas de tu vecino cortar, pon las tuyas a remojar’ y es que en un país como éste tan dado a las imitaciones de ninguna manera se puede descartar que los anti taurinos se oxigenen queriendo tomar como ejemplo el movimiento alborotador que se está viviendo en una de las ferias más importantes en España.

Los Sanfermines en México
Y decir que por acá ya está causando furor entre los niños una obra de arte editorial  diseñada e ilustrada a todo color por el creativo Javier Inaraja, elaborada con tecnología 3 D, la cual más allá de la tercera dimensión  se despliega hasta formar un carrusel  que al abrirse en su totalidad semeja la forma circular de un albero, la obra ha sido titulada ‘Los Sanfermines’ lanzada al mundo por Susaeta Ediciones, S. A. con sede en Madrid y que en la Ciudad de México gracias a la vanguardista visión del  librero  Dr. León Bailón Urioste  la tiene en exhibición y venta en la Librería Tauro (Justo Sierra 30, Centro Histórico), ‘Los Sanfermines’ son   de lo más llamativo que se puede encontrar en esa librería que alberga más de un millón de libros, con su portada coloreada con dibujos animados donde se ve a un toro y a sus lados los corredores con sus  periódicos, aparecen también unos niñitos  corriendo, mientras una niña toca el flautín y el tamborcillo sin que falte un alegre perrito.

El libro didáctico está compuesto por secciones o capítulos que comienzan con la inducción a lo que son  las fiestas de San Fermín, arrancando con el chupinazo, al que le sigue una explicación sobre los encierros, luego viene otra detallada sobre el llamado encierro ‘Chiqui’ en el cual participan  los niños pamploneses preservando así las tradiciones de una región emblemática de España, le sigue un capitular sobre los campeonatos típicos de deportes rurales, luego el figurativo  aborda las comparsas con los gigantescos cabezudos que por supuesto son una atracción más pa’ los niños y remata con un reconocimiento al premio Nobel y premio Pulitzer; el norteamericano Ernest Hemingway, quien como ya se dijo,  pusiera el nombre de Pamplona y sus Sanfermines en los cuernos de la luna.

 Y  decir que la obra  no podrá faltar en las bibliotecas particulares de todos los bibliófilos y aficionados, quienes rutinariamente nos preguntan ¿cuál sería la mejor manera de estructurar su viaje a las ferias de España?  entre las que desde luego se destaca la de Pamplona, y a ellos les informo que ahí mismo en la Librería Tauro, encontrara Las Guías Océano España, donde desde los albores usted se encontrara con una hermosa fotografía a doble página de ese sabor de las tabernas clásicas donde resaltan  carteles con protagonistas como Diego Puerta, Paco Camino, “Paquirri” y otro con la solera de “Curro” Romero, Rafael de Paula y Paco Alcalde, ya después directos al espléndido capítulo  que está dedicado a Los Toros y en el que como si los editores predijeran lo que está sucediendo en Pamplona a manera de cabeza se lee; ‘A pesar del creciente número de detractores, las corridas de toros siguen gozando en España de gran popularidad’ y ahora sí, a meternos a los mapas y listos a viajar por la ferias españolas.

Y ya que de baranda hemos referido el nombre de Don León Bailón decir que este mecenas de la cultura es quien se ha echado sobre la espalda, junto con los Hnos. Asencio la interesantísima faena de instalar en el corazón del Centro Histórico dentro del centenario Salón España (Argentina y Luis González Obregón) ‘El Rincón Bardiano’ en donde en un ambiente al estilo de ‘La Taurina’ (c/Carrera de San Jerónimo) en Madrid los aficionados podrán al cobijo de pinturas, fotografías, carteles, cabezas de toros, libros, reliquias y pasos dobles, disertar sobre la apasionante Fiesta Brava, en una de sus manifestaciones más vivas, que lo es la convivencia con los amigos en alternancia con el buen yantar y mejor libar.

miércoles, 20 de junio de 2018

LA DIFERENCIA, ES LA GRAN DIFERENCIA



Desde el domingo pasado  que en Rusia, el ‘Tri’ de varios goles que ahí estaban metió uno orgásmico que le valió pa’ que se convirtieran para algunos en ejemplo de cómo los toreros deberían de entregarse en su  oficio, ante eso la primera pregunta sería ¿es coherente comparar la pasión, entrega y ejecución? que se da en un deporte, con el que se despliega en el arte del toreo en donde por principio de cuentas, una, es una expresión de conjunto y la otra es individual, en el de las patadas los actuantes tienen 90 min., para mostrarse, mientras que los toreros lo hacen en menos de 30 min., los futbolistas si se equivocan, la vuelan,  o se la entregan a un contrario, más los toreros si se equivocan corren el riesgo de quedar invalidos, corneados o muertos, entonces por lógica la presión con la que unos y otros ejecutan sus oficios, no tienen punto de comparación.


Después de aclarar esto leí por ahí y vi en  las redes sociales que los toreros deberían de aprender del carácter de los futbolistas y aunque lo tuviesen igual, insisto, nunca les funcionaría pues una cosa es enfrentar a una esfera volátil que a un par de cuernas vivientes que son orientadas por el bravo instinto de un animal vivo y corpulento, otra a considerar, nunca será el mismo estado de ánimo actuar en una sede repleta y animosa que les contagia de entusiasmo, que hacerlo en un coso casi siempre desértico o a menos de su cuarta parte, una más, los jugadores profesionales están más  placeados que un diablero en La Merced, pues entrenan diariamente hasta dos veces en el mismo terreno, con las mismas rutinas, con la misma ropa y con el mismo balón que usan en los partidos y los días que no lo hacen, que pueden ser dos  es porque tienen encuentros, mientras que los toreros  entrenan de salón generalmente en un parque, con un compañero que trata de imitar la envestida del toro y la toreada a los jóvenes se les da en la mayoría cada día de San Juan.


Más diferencias los pamboleros que andan en Rusia gozan de unas remuneraciones económicas  más jugosas que una naranja, mientras que los novilleros en gran cantidad ni reciben paga por jugarse la vida o hasta tienen que pagar por torear, así que no nos confundamos y lo que si recomendaría a los que se subieron al tren,  es no perder el piso, porque precisamente por echar a volar a los jóvenes, que ilusos se lo creen  es que no llegan a alcanzar la madurez porque pa’ caerse del pedestal de humo les basta con un autogol.  




lunes, 18 de junio de 2018

¿Qué culpa tiene el bull del fut?

El Toro en México
Por Bardo de la Taurina
Apenas metía los ojos en El Imparcial, que todavía está caliente, cuando como por imán fueron jalados a una imperdible columna sin desperdicio  y con docencia y mucho de nostalgia para los locales aztecas que el maestro Rafael Cardona bautizó como ‘La quincena,  el Mundial y la ola’, ahí entre lo interesante,  que ya es mucho decir en el mundo de lo más interesante leí, ‘Hoy todos somos fútbol’ y entonces me saltó preguntarme ¿Qué culpa tiene el bull del fut? Y es que en un país tan triste donde la venganza y el odio que se le tiene al gobierno actual, el cual hay que decirlo, es igual que todos pa’ los disfraces y el engaño, va a ser castigado con la entronización de un mesías populachero, que confunde lo mitológico con el mito que es su casaca, por ello con todo y su hipocresía es rechazado por el 60% del pueblo, lo que lleva a la gente a mientras le llega la hecatombe a agarrarse al fut, el que por cierto pa’ los aztecas anda en lo blanco de las nubes de algodón, que por ende son un pedestal momentáneo y endeble, y vuelvo a preguntarme, ¿pero que culpa de ello tiene el bull?

Y es por eso que la Fiesta del Toro y los Toreros que por esencia es brava, debe siempre de estar en pie de guerra, no agazapada sino activa y altiva, sacando todo por su propia lucha porque el toro es una llama que sigue viva en el México dividido, en el que muy pronto los asesinos y delincuentes van a tener una placa de impunidad de una nueva división con gozo de intocabilidad que se llamara Amnistía, y peor aún si es que dentro de las garras de lo maligno es menos catastrófico toparse con unos profesionales del mal, que con la caterva de irresponsables zánganos buenos pa’ nada con los que mediante una paga Andrés Manuel López Obrador va armar su fuerza de choque llamada ‘Ninis’, la que lo mismo va a usar pa’ arrebatarles el aplauso ‘espontaneo’ cuando todas las mañanas se asome a mentir y  arengar desde el balcón del Palacio Nacional, tratando de imitar a la Evita Perón  ante los ‘descamisados’, cuando todavía eso no se volvía un show que llegó tiempo después a las marquesinas.

Aquí ya se estará usted preguntando ¿pero qué tiene que ver esto con la Fiesta Brava en México?, allá voy y ya estoy llegando a lo espeluznante donde las dos fuerzas a las que me he referido renglones antes van a entrar en acción y dije las dos, porque los de la Amnistía no hay que descartarlos como los francotiradores de élite.

Meto reversa y ya estoy otra vez en hace unos días que debieron ser los de hace diez noches, cuando en la llamada Tierra del Mayab en el sur del país aparecieron el que seguramente será el consorte de la primera dama del territorio, pareja que ya hasta tienen la silla presidencial pa’ que sea lo primero que la mudanza meta al recinto histórico, bueno pues en ese convivio que mal llamaron debate cuando no debatieron nada y si aventaron chupinazos a diestra y siniestra, para la gente que lo escucho en gran medida tal vez les pasó desapercibido un hecho que a los taurinos y a los que no son afectos a la fiesta, pero que la respetan les debió da haber intrigado, y el cual se dio cuando en determinado momento salió a relucir la venta de plazas laborales, que una de las fracciones del magisterio con todo cinismo venía realizando a cielo abierto, bueno la cosa es tan patética que hasta los puestos de los maestros son hereditarios.

En una de esas López Obrador cacho la bola y dijo más o menos entre su somnoliento mal hablar, -Que el único que aquí vendió plazas cuando era Gobernador es el actual Ministro de Educación Otto Granados Roldan- y con inusitada claridez, velocidad y precisión, pa’ un hombre mediano, aseguró  en palabras semejantes  -Otto Granados siendo gobernador de Aguascalientes vendió las plazas de toros-, ¡Ah caray! ¿Por qué tiene en la punta de su viperina lengua ese dado tan acertado y fresco?

Y es aquí donde la Fiesta de Toros está avisada de que va a entrar en riesgo, ¿por qué? pues por el hecho de que el dato preciso de las ventas de toros trae una cola más larga que el rabo de un toro bravo… ¡ta, ta, ta, tan! la respuesta es que el comprador y hoy propietario de esas plazas de toros y de muchas otras a las que se suman ganaderías y corredurías del manejo de toreros, forman parte del emporio personal, familiar y corporativo del empresario Lic. Alberto Bailleres González, el que por si usted no lo sabía amable lector, también se extiende a territorio español.

Huelga decir que la mayoría de las plazas de toros de este país en propiedad o administración pertenecen al Grupo Bal cuyo dueño no nada más forma parte de quien por su nombre y apellido con rencor y saña ha sido mencionado subrayadamente como uno de los más distinguidos miembros de la Mafia del Poder, y traficante de influencias, así que ya imaginaremos hacia quien estarán enfocadas las primeras tarascadas letales y devastadoras que va a lanzar López Obrador, ¿cómo lo va hacer?, expropiando o fastidiando hasta aniquilar las plazas de toros de este ilustre personaje, ¿la logística?  a través de su ejército de zánganos a sueldo mentados ‘Ninis’ a los que me refería en un principio quienes siguiendo órdenes oficiales,  en cada corrida en las plazas del consorcio fastidiaran el ambiente hasta que los aficionados dejen de asistir por incomodidad y temor a plazas tan importantes como La México, la de Guadalajara, las de Aguascalientes etc., etc. y solo agregar si a eso le sumamos una posible mayoría en las cámaras legislativas desde donde vía votación también pueden aniquilar la fiesta, ¿Verdad que hay razón pa’ ocuparnos y preocuparnos de la política?
Y si a eso le sumamos los anti taurinos, ¿Cómo ve usted el panorama?...



jueves, 14 de junio de 2018

SOLO LA MUERTE ALIVIA



El domingo pasado el torero Mario Aguilar opto por la tierra del nunca jamás, y sobre ello leí de la pluma enterada que lo es, la del matador Lorenzo Garza Gaona -Nadie sabe lo que hay detrás de la vida de un torero, sus padecimientos, sus frustraciones o sueños. Muy dura la profesión…-  y me tiré a pensar en lo complejo  que lo es el mundo de la toreada donde uno de los males lo es la coba (tsunami de alabanzas) de la que son víctimas los toreros vivos y muertos (¿Por qué no se la dieron en vida?), coba  para la que  los jóvenes no  están preparados y con la que se les vicia desde edad primaria y por ello se hacen adictos a las empachadas de melcocha, aunque lo correcto sería decir de engaño.


 Con crudeza, si así la quieren calificar los coberos, en repetidas ocasiones hemos preguntado  ¿qué caso tiene se les haga creer a los ilusos que tienen posibilidades de ser toreros? y ya en  la inconciencia  con una orejita, se les augura su ascenso al altar  de los ídolos, que no necesariamente son figuras pero tan difícil  una etiqueta como la otra,  el engaño  es una bajeza que en casos llega a oficio pero lucrar con los tiernos es una vileza, aquí habría que preguntarle a la parentela,  a los aduladores ¿Qué tan difícil es hablarle a los toreros con la verdad?, ¡No naciste pa’ esto y punto!, o la cuerda se acabó y a otra cosa, porque torero que no es rotundo es rechazado por  los empresarios. ¿pa’ qué le sirve? si esto es un negocio.


Más resulta, que ante los chavales se convierten en  paleros sin importarles clavarlos claro, como ellos no van a recibir los chingadazos, no van a correr el riesgo de quedar cuadripléjicos pero sobretodo no van a sufrir en carne propia cuando el alma, la moral, el sentimiento se les fracturen, se les desmorone, por la frustración, los descalabros, los engaños y las realidades, esas que calcinan hasta castrar la voluntad como resultado de vivir en la perene frustración de la impotencia.


Más todo eso  tiene un origen, repito el engaño, sin que esto exima a los jóvenes que  ya son pensantes y ahí siguen en la hamaca de la cachondearía,  ¡esto es serio jóvenes!  porque luego en los momentos lúgubres viene el demonio  y se les mete en la más nefastas de las formas que lo son los churros,  los hongos, los peyotes, las amapolas, que sí, son naturales y por eso en forma natural les flagelan las neuronas y de ahí a piltrafas humanas, no hay más que un pase.

Cuando se vive en  el infierno,  solo la muerte alivia.



domingo, 10 de junio de 2018

El gozo se fue al pozo y con ello volvieron los toros



El Toro en México
Por Bardo de la Taurina
 La neta es que en este país, nada de lo que disque se planea sale como se pensaba, así llegamos a esta fecha donde la actividad taurina pensaban que iba a entrar a un relax por dos razones que creo que en orden de importancia es la actividad mundialista de las patadas donde en Rusia 2018 va a pujar México por el cetro de la potencia más mediocre de las que calificaron que dicotómicamente son brillantes, para hacer el ridículo y arrastrar la cobija   los dueños del huevo de oro, o sea el balón, trajeron a un farsante  que encontraron en tierras colombianas y que ha cumplido a cabalidad con el objetivo, que era el tener un títere o pelele que pusiera a jugar, si se puede llamar a eso jugar, a los jugadores en todas las posiciones, incluyendo las de aguadores, utileros y alquiladores de carne fresca en noches de fantasía, ¿con qué objeto? Pues con el que todo se hace en este país, ganar dinero a costa de lo que sea.

Y es que mire usted, cualquier entrenador normal contratado pa’ armar una selección representativa a nivel mundial, lo que hace es poner dentro de la casaca nacional a los mejores jugadores en cada posición y ya con ellos anclados pues solo se admitirá algún pequeñísimo ajuste o una variante en nombre, cuando las lecciones los exijan, pero no cambios drásticos de sistemas, más lo que  Juan Carlos Osorio por conveniencia o por orden de los dueños de los esclavos (jugadores) ha venido haciendo,    es que como en México hay muy buenos jugadores, nada más que igual que como los toreros, son faltos de enjundia y ánimo pa’ trabajar como lo hacen las figuras, pue entran a un rol que es el de ser vendidos en Europa como piezas de primera, segunda o tercera, lo cual les reditúa a los dueños de los equipos unas enormes utilidades ¿Cómo se hace esto?

Pues bien, la logística; que la mafia del poder de pantalones largos le compró o se tragó del colombiano, tal vez sea que a costa de mancillar el orgullo nacional de esta forma de vibrar en México a través del futbol, se denigre al jugador usándolo como moneda de hacer más monedas mediante exhibir a la mercancía (jugadores) aparte de en su posición natural en otras 10, con algo más grave que convoca por costumbrismo cada vez a nuevos jugadores pa’ ser vistos tratando de jugar lo mismo de defensas que de delanteros, por el lado derecho que por el chueco,  se fueron tres años exportando jugadores al viejo continente y ahora resulta que esta semana comienza La Copa del Mundo y México no tiene equipo, porque nunca en la época del colombiano se repitió una alineación.

Apenas este sábado después de una  reconfortante orgía en el que los seleccionados nacionales clavaron de palomita y desde todos los ángulos ante las féminas, que por más que sacaron el pecho, juguetearon con el quiebre de cintura, mostraron los muslos más vigorosos de por acá, sucumbieron ante la buena condición física pa’ el box spring  de los seleccionados, con cuya etiqueta de vencedores en la justa de encuerados llegaron a Dinamarca, en donde al colombiano de marras se le borró el casete y no solo no supo a quién alinear sino que amontono a lo estúpido las piernas, dejo a los mejores en la banca y a los lastimados los consintió con promesas de que aunque sea en muletas o sillas de ruedas los alineará contra Alemania el en el debut el próximo domingo.

Ante esto, los taurinos con la moral en los tobillos al unísono exclamaron ¡Al Carajo el futbol! y  volvieron a los toros, continuando así este fin de semana el show de los ‘Soñadores de Gloria’ en una de sus etapas cruciales, con cuatro chavales entrones, cojonudos, enjundiosos, con hambre de triunfo ¿Por qué no los mandan a Rusia?, no, mejor ¡no! porque allá al entrenador si les parte su mandarina en gajos,  así que mejor al Toro que es una mona y venga que se vistieron de luces los chavales el domingo en una plaza  pegadita a las praderas de asfalto de la capital  y así, no se quedó la zona conurbada sin toros.

Se vieron cuatro toreadores entre los que sobresalieron  dos que se salen del molde, de lo convencional, que lo son  Francisco Martínez y Roberto Román, ambos  al alimón diferentes como el sol y la luna en sus maneras, más convergentes en muchas de las formas y maneras básicas que son indispensables pa’ caminar en esto, se les ve con presente y con futuro en el que solo hay que cuidarles sus maneras originales en las que incluyen el andar entre las cuernas y algo envidiable, el ser poseedores del don del conecte y la trasmisión y además de torear  arrebatan, diciendo de que a la gente le gusta que no gocen de influencias, son raza, pueblo, como el que hace a los ídolos.

Seguirán avanzando en el certamen y quién sabe si alcen la copa al final, lo que sí, es que estos chavales desde ¡ya! traen tatuada una marca o sello que dice, ‘voy derecho y no me quito’ ante el toro o  los toreros colegas y eso es razón de más pa’ repetir sus nombres pa’ que el público cuando los vea anunciados acuda a las plazas a admirarlos y también pa´ que las empresas sepan que estos dos cascabeles, son sinónimo de garantía de atracción, entrega, valor y bien torear, subrayo se llaman Francisco Martínez y Roberto Román.




jueves, 7 de junio de 2018

ROBERTO ROMÁN, SOLO ES UN TORERO



La gente que hace negocios cuernófilos  organizó un  experimento  donde  los chavales que andan oscilando entre graduarse de ninis  o entrarle mayoritariamente a la  ‘troqueladora de  novilleros’ tuviesen al estilo pambol sedes donde mostrarse, al certamen  la raza que es rete ingeniosa  rebautizó el maratón que va de marzo a octubre, como el de ‘Los dreamers  del cuerno’, bueno el caso es que el calendario (draw) quedó dividido  en etapas 1, 2 y 3 cuando lo taurino hubiese sido que cada uno de esos períodos lo denominaran ‘Joselillo’, Félix Guzmán y Valente Arellano, pero quien sabe si los organizadores sepan que esos nombres fueron de los paladines de la novillería.


El   torneo linda la mitad,  en donde ya  se eliminaron los tiernos y los menos suertudos y con ese motivo el   domingo  10 en una placita florida del Edo. de México se dará  el festejo de triunfantes del medio tiempo, con novillos de San Marcos, también con ese parte aguas  la caravana aterrizara en diferentes plazas que se hallan entre las doce elegidas, en el experimento  ha habido de todo, pero en lo torístico  a decir de algunos  ha faltado el  trapío   ¿sobre proteccionismo?,  más bien creo   que ha sido por ahorro de carnes,  y  la enjundia sin hambre,  de ahí lo ralito de los graderíos  ¿quién los va a retacar? Si esta faltando jalón en los actuantes.



Entre los nombres ha habido intrascendentes, transitadores esperanzadores y algunos pegajosos,  entre todos esos que han sido un bonche, ronda por ahí Roberto Román, un chaval no maquilado el que por principio tiene nombre que recubre a un torero tradicional en su forma de  comportarse en este enredo, es un joven con hechuras e iniciativa que le alcanzan pa’ agarrar el teléfono sin pedir loas, sin mentiras, sin disfraces, sin espejillos y llanamente pide la posibilidad de apoyarle difundiendo que va torear, lo cual hará en la de triunfadores ya referida, avalado en que ha venido poniendo riñones y podando orejas, Roberto Román, no es un figurín solo tiene un corazón arrebatado, no tiene un toreo definido solo una enjundia ilimitada, no posee  gran técnica solo va tras el triunfo como un doberman, no es de plástico, tan solo es de verdad, no  toma esto como pasatiempo solo como orfebrería,  no vive de soñar solo de estar donde está el triunfo, que es donde huele a cloroformo, pero también a torero de esos que enchufan con el pueblo, ¡ojo! en Román hay un cascabel solo déjenlo a su aire y en una de esas arma la marimorena.






domingo, 3 de junio de 2018

Cayetano ¡Un señor!



El Toro en México
Por Bardo de la Taurina

Tal vez en el mundo existan dos países, donde las orejas sean más baratas que los sorbetes pueblerinos, esas dos naciones lo son los Estados Unidos de Mr. Trumpetas  donde en los estados de California y Florida conforme se va acercando uno a los reinos mágicos de Disneylandia le empiezan a obsequiar las famosas orejas y orejitas de Mickey Mouse,  y el otro lugar también sede de la váratela lo son las plazas de toros mexicanas, donde el despilfarro  con que se realiza esa tomadura de pelo, es pavorosa, ridícula y por ello hasta insultante pa’ el espectáculo mismo.

Hoy en México  ese patético despilfarro es uno de los tumores cancerígenos que mayor daño le han causado a la Fiesta de Toros y Toreros, por la razón obvia que cortar, recibir en dadiva o  como galantería del palco una oreja sin valor, pues no causa más que náuseas y devaluación del apéndice, conozco algunos jueces de plaza que me distinguen con su amistad y mi menda les corresponde con respeto, más lo personal nunca será impedimento pa’ señalar los secretos a voces, que  cabe la posibilidad de que incluso los señores que suelen ejercer de jueces, no estén al tanto de ellos, y en todo caso se le puede incluso considerar como  víctimas de las circunstancias o hasta de sus propias personalidades, ¿Qué cómo está eso? pues como algunos alcohólicos que son los últimos en enterarse de su candidatura al club de Baco.

 Cuando en la Plaza México el empresario lo era San Satanás, el  galeno  Rafael Herrerías se decía o creía que los jueces por temor al endemoniado carácter del promotor o por otras cosas que vaya usted a saber si siquiera existieron (no lo sé, a mí no me constó y por eso nunca hable de ello) y que se resume a que con esa alineación de jueces tan extensa nunca han podido unificar criterios y ni a la hora de juzgar si un toro cumple pa’ ser lidiado de acuerdo a la categoría de la plaza, en los últimos años se  desorejaban a las reses con  más imaginación y fantasía que la Kriptonita.

 El caso es que el thriller que en algunos y con algunos personajes, no con todos, ¡afortunadamente!  empieza  conjuntamente con los empresarios, los ganaderos, los picadores y los jueces, que agarrados de la mano,  son  las gentes menos aceptadas y hasta por el contrario, ¿la causa?, en orden; los empresarios por la razón que casi siempre será muy difícil complacer a todos en el armado de los carteles, sumándole a ellos las ganaderías de  bravura laxas  que adquieren y que van en contra del espectáculo desde el punto de vista de los aficionados,  esto mismo alcanza a los ganaderos a los que se les sataniza por vender animales que no son propios como ya se dijo pa’ la categoría de determinadas plazas, en estos caso digo que hay tres clases de ganaderos, los que lo son por tradición y/o afición, los que están en esto por esnobismo y los que lo hacen por puro negocio, a tanto la edad, a tanto el kilo… el que sigue, los picadores por tradición ya se sabe la animadversión que existe hacia ellos.

Con los jueces dicen los de pipa y guante y los de galería, es decir todos, que chorrean hasta derramar un innecesario, injustificable y chocantisimo exceso de protagonismo, cuando reciben al paseíllo de las cuadrillas con ese porte echando el pecho tricolor, la mirada del orgullo, los brazos elevándolos como lábaro patrio en 16 de septiembre desde el balcón presidencial, luego ese jaloncito cortito y vigoroso como la preparación del Jab fulminante del Ratoncito Macías el cual usaba pa’ mostrar el músculo y la quitada del sombrero texano, digna de López Moctezuma en un film del Indio Fernández, ahí a la gente  se le revuelve el estómago y se las empieza a guardar, pues si bien la fiesta no es de descamisados  tampoco  puede ser paradigma de ostentación de un hombre que es empleado delegacional y al que solo le falta la Banda Presidencial.

Y vienen  el acto estelar, el del  cobro de factura, el que se da  a la menor posibilidad de alharaca sin importar  si hubo faena o cachondeo, estocada o lo que se le parezca,  la gente con esa muina guardada y sin reparar quien sea el torero, en lo que hizo o dejó de hacer, se empiezan a enchufar en los tendidos a través de los kleenex o pañuelos desechables y el juez ve una oportunidad de  volver  a enseñorearse desde el palco presidencial y es en ese momento cuando le empieza a reventar la ulcera a los miles de aficionados, al darse el trance de por estilo o costumbrismo usía se hace del rogar con desplantes que van  de lo rondeño a lo gitano y abajo la gente con las piedras en el hígado moviéndosele  como licuadora, está que arde, y ahí viene el temple del juez que aguanta  estoico, incólume, que se desgañite la masa, que ruja la prole pañuelo en mano, que el de abajo siempre sea el de abajo… ¡va la oreja!

Y aquí es donde hay que excluir al matador, al torero,  al torerín, el que al momento de recibir la oreja de mentiras que fue exigida un segundo antes, es avasallado ahora por un tsunami de pitos, de contras, de infundios, de gritos, de peladeces, de reproches, pero que hay que  diferenciar las manifestaciones negras que siempre lo son para el juez y la oreja de la discordia pues aquí el de luces, se vuelcan sobre de ella hasta casi arrebatársela al alguacilillo, creyendo en las más de las veces que la merecen sin importar la kermes de los alaridos insultantes, ¡no, no, no!, regrésala, tírala, fuera, buú...buú…

En Madrid un torero, un señor, un educado llamado Cayetano con toda la dignidad del mundo en la Feria de San Isidro, dicto la norma de la categoría y el respeto supremo del que debe de hacer gala un matador de toros, con motivo de una oreja dudosa; silenciar primero a la turba rijosa, congelar la acción en el tiempo y ya con la tormenta amainada levantar la cara del triunfo de la cordura, de la conciliación, del poner las cosas en su real contexto.
¿Habremos aprendido la lección?