Un lucero en el cine.
Nació siendo un Lucero
de luz, clase y taurinísimo y por ello fue rubricada con el abolengo de los
apellidos Domínguez Cobián, su afición por la fiesta de las divisas, los
claveles y la seda, la llevaron desde su fresca juventud a iluminar los
tendidos dorados de los alberos y con el tiempo, de su fina figura aporcelanada,
el corazón de la pasión se le desbordo hasta convertirse en co-empresaria de la
plaza boutique de Cinco Villas, más hace
unos días ha sorprendido al ambiente de la alfombra dorada, con su incursión en
el mundo de la producción fílmica taurina, lo cual se abona en favor de la Fiesta
Brava, la que cada día requiere de mayores escaparates y luces como las que
encendió Doña Lucero para promoción y atracción
de las panderetas del arte las que cada
vez más urgen de ser acurrucadas con nuevas concurrencias, de ello, que con
dianas de alegoría demos la bienvenida a la primera entrega imaginativa producida
por ¡MOVIE LDC PRODUCCION la cual ha confiado la dirección de la lente al
extraordinario fotógrafo Sergio Hidalgo, en el guion se destacan frases como ’Cinco Villas donde las
oportunidades no tienen nacionalidad’, ‘Y los triunfos se dan con verdad’, y
que decir del sound de obertura muy al estilo hollywoodense, el debut del film
se dio bajo la punta de lanza de la Novillada Hispano Mexicana que se celebrará
el 20 de junio en el predio áureo, así que en ¡Hora Buena! al ‘Lucero de la Fiesta y las
Pantallas’ y a su casa productora, fílmico taurina.
Todavía están
calientes las cenizas del pintor Reynaldo Torres, cuya tatemada no ha sido
pagada por los herederos del pintor,
quienes las reclamaron a quien hasta su muerte fue su pareja de coraza sin la cual el maestro se hubiera palmado desde
‘endenates’, pues fue ella quien que le llevaba de comer, le compraba sus navajas de rasurar y hasta los pañales, lo
bañaba y le curaba las hemorragias que el alcohol barato por el que cambiaba
sus obras le producía, más el caso que nos ocupa, es el de informar al público el hecho de que el nombre del maestro Reynaldo
Torres está siendo ensuciado por la avaricia y ambición de quienes no son
dueños de una ‘obra’ por la que él lucho pintar para promocionarse y la cual no
nada más se le encargo sino que le fue
pagada íntegramente, pasando con ello
hacer propiedad ajena, más la ‘obra’ regresó al estudio para su
modificación pues al artista le fallaron los colores cambiando la sobriedad por
lo psicodélico, esta ‘obra’ es asimétrica (deforme) pues así se le pidió al
pintor para que de un lado quedara el toro embistiendo al aire llevándose entre
los pitones a un valiente y al otro lado quedara pálido con el objetivo de que
ahí cayeran las letras de la portada de un libro para el que fue mandada hacer,
es decir, no se trata de una ‘obra’ pa’
venta, más el caso es que unos norteamericanos con ayuda de
nacionales con los que tenía ligas el ‘Señor de los pinceles’ sin respetar lo que no era del propio pintor
la secuestraron en un acto previo al plagio, algunas obras supuestamente ya volaron a los Estados Unidos,
por lo que se vera la manera, de que si es el caso, el FBI tome acción y aquí lo haga su contraparte, pues trascendió
que la ‘obra’ referida junto con otras se pondrán a la venta por terceros, claro
si antes las autoridades no la incautan, y cabe señalar que el secuestro quedo
consumado desde el momento en que les fue notificado a los retenedores uno de los
cuales acepto conocer y tener teléfono de a quien hay que devolverle la ‘obra’ que fue
la persona que la liquidó y hasta el momento no han procedido a su
devolución, así que tenga usted cuidado aficionado si alguien le ofrece la
‘obra’ mejor sésguele porque comprar robado igual que
vender con dolo o encubrir; es delito, y está es también una alerta a los sitios de exposición, una Nota Roja a la que hay que darle seguimiento y
así lo haremos en medios y redes sociales.