México
Anexas…. las Bardianas
Arte Fco. Álvarez - Minotauro
Independientemente del resultado que se haya registrado en el
cartel que se celebró el sábado reciente que en el tiempo real es pasado
durante la feria de San Marcos 2019 de Aguascalientes, México, a quienes nos hacen favor de leernos que ya
en el costal son muchísimos pues rebasan los veinte medios, todos
independientes y profesionales (¡Gratitud!) lo que les interesa saber es sin
duda ¿Por qué un cartel que tenía todos los ingredientes básicos para un mole
de arte, lo guardaron o redujeron a un guiso de caldillo?
Sin que como seguramente diría la mexicana Daniela Soto-Innes quien
recientemente fue galardonada con el premio World's Best Female Chef 2019, a la
mejor chef del mundo ambos son suculentos, más cuando hay caviar sobre la mesa,
no se le debe más que combinar con lo de su especie citar: El Caviar Almas criado en el Mar Caspio cuyo kilo alcanza los 25,000 U.S, el Caviar Asetra Imperial el del terno
ambarino, el Caviar SOS Beluga muy
intenso en su sabor como en lo grisáceo de su color, lo que quiero decir que
siempre los del arte deben de ir con los del arte, por cierto y a manera de
breviario señalar que en de Caviar House
& Prunier que es la distribuidora master del Caviar Almas allá en el barrio de Picadilly en Londres cada año se
lanza una campaña en base a pinturas originales y específicas que serán exhibidas
en las latas y frasco que resguarden el producto del rey de los esturiones.
Guillermo Capetillo por única y última ocasión en su vida en
esos lares, fértiles, aromáticos y arropadores, pa´ la ocasión del adiós que además pudo haber sido la última de
las últimas, todo estaba dado pa’ ello,
pues el son al estilo Guadalajara con el toro grandote, bravucón ¿quién sabe si
Capetillo se lo baile?, una regiomontana muy norteña será
casi infranqueable y la Plaza México si es que viene, no creo que vaya a ser como
pa’ llevar las hojuelas y la miel, José
Antonio Morante de “Beluga” el manjar
más codiciado de todos los mares y de todas las tierras, de todos los alberos y
de todos los altares pues no hay uno solo donde no sea venerado, aunque como el
Santo Niño de Atocha, también es
polémico.
El tercer espada forzosamente pues contra la lógica no se
puede ir tenía que haber sido otro de esa línea, que por razón natural o
coherente no era otro que Jerónimo que
cierto es, siendo quisquillosos, es un torero a la mexicana con arte o recurrir a los matadores ibéricos
Javier Conde o José Garrido, ¿entonces por qué haber completado el cartel con
quien lo hicieron?, la grandeza existe en todos los rubros, como el arte máximo
de un empresario es armar carteles con arte que no es lo mismo que carteles de
arte, vamos al ejemplo; usted jamás vera anunciado un mano a mano entre la sinfónica
de Londres y el Mariachi Vargas de Tecatitlán, como tampoco nunca vimos en el
mismo cartel a María Callas con Lucha Reyes, no quererlo entender así es cómo
negar que las manzanas deben de ir con las manzanas, una gran oportunidad que
dejaron pasar esa franja de sujetos que
arman carteles extraviando la sagrada regla del respeto por la esencia que es la
de las pócimas taurinas, bueno lo que hicieron hasta económicamente les resultó
chipotudo, porque ya con los caviares
sobre la mesa, ¿pa’ que meter sin ninguna necesidad a uno que no embonaba, lo que no lograrían ni yendo a bailar a Chalma.
Y como a estas alturas ya me estarán mandando a tiznar a mi madre y sin afán alguno de
buscar una justificación, yo le invito a usted a que me saque de mi error
cuando aseguro que México es un país fértil en torería, pero siempre encajonada
y rebosada muy específicamente en determinados cajones entre los que están los
de pegapases, los valentones, los
técnicos, los valientes, los guerreros, los todoterreno, los bulliciosos, los enjundiosos,
los del temple, los de personalidad, los de a la mexicana, los de a la
campirana, los de la jornalería, los del
troquel, los gitanos, los pintureros o de pincelazos, los voluntariosos, los
tremendistas, los poderosos, los cuña, los disparejos y ha habido un grupo
que no están en los cajones a los que me he referido ellos en la historia están
guardados en estuches de seda y oro en la joyería del arte ahí encontramos
nombres de matadores todos dones como
Silverio Pérez, Alfonso Ramírez “El Calesero”, Fernando de los Reyes “El
Callao”, Manolo Martínez, César Pastor, Rodolfo Rodríguez “El Tahonero” y hoy…
Y para reforzar esto, enfáticamente asiento que en la fiesta
brava el arte siempre lo será el espíritu puro e inmaculado de los bordadores
de la fantasía que son los hacedores del arte por el arte, por eso un día
Manolo nuestro Manolo dijo; El arte soy
yo. Y no han de estar tan errados en esto los siempre respetables ibéricos quienes
tienen fundado su religión taurina en la divina providencia del arte que en sus
tres ángulos la soportan los maestros Enrique Ponce, José Antonio Morante de la
Puebla y José María Manzanares acompañados por el poderío de Julián López “El
Juli”.