El Toro en México
Por Bardo de la Taurina
En este país donde mucho de todo se confunde al grado
que en un sexenio anterior hasta
tuvieron que implementar a un personaje vocero que traducía lo que el que
presidente quiso decir, y bueno, como será eso de las confusiones que hace
poco vía cibernética el historiador Francisco Martín Moreno tuvo que escribir
(cito textualmente)
No nos confundamos: el
enemigo a vencer es el gobierno corrupto y en ningún caso México. No nos equivoquemos de enemigo. México
no se merece que se le apuñale por la espalda al encumbrar a AMLO hasta la
Presidencia de la República y volver a arruinar este maravilloso país…
Y sí, así pasa en este país en todos los órdenes donde parecería que el verbo nacional por
antonomasia es el de confundir, enredarnos, dando como resultado que por largos
períodos vivamos empantanados en el oscurantismo de la mentira, la falsedad y
la inexistencia de lo real y la existencia de lo irreal, bueno a grado tal que
llegamos a construir una forma de ser y creernos las cosas que bien se podría
patentar como hecha a la mexicana.
Esto me trae a
recordar el que no soy muy afecto, más bien nada a las distracciones,
simulaciones, desahogos, exhibicionismos o no sé ni cómo llamarle a esas prácticas
del uso de las redes sociales en su división de los usurpadores, porque hay
otras donde los profesionales dan catedra y esa por supuesto es más que
admirada y respetada, de las primeras expreso; ¡Qué
barbaridad! El solo activismo me horroriza y me pregunto ¿Cómo puede pensar un ser por insignificante que sea, que a través de escasos
caracteres se puede transformar en el más importante de los comunicadores del
orbe?, no lo sé, no lo entendiendo y no lo comprendo.
Ignoro si en estos medios y en todos existe un código de
ética, bueno el caso es que dos grupos de aficionados me incluyeron en esa otra
modalidad de expresión o comunicación que se conoce como chats de WhatsApp, y
ahí estoy en forma pasiva porque nada más leo pellizcando y eso dependiendo del
autor pero indebidamente y con una falta de educación, que el Manual de Carreño
si de eso en su tiempo se hubiese ocupado me lo estaría reprochando y hasta
recriminando mi falta de atención, jamás contesto, por lo cual pido disculpas,
pero es que asumo que no estoy al nivel intelectual o de sapiencia de los
miembros que en materia de cultura y en
concreto de taurinismo radican en el código postal del Olimpo, demasiado grandes pa’ mí, insistió a manera de
justificación, yo me quedé cuando la Fiesta era Brava y no una baba.
Me permito decir que dentro de uno de esos grupos sin duda se
hallan algunos de los pocos personajes más leídos, instruidos, capacitados,
reconocido y respetados en materia taurina sin duda, al grado que fue para mí
un auténtico privilegio y honor contar con algunos de ellos cuando forme el
programa Voces de luces y aún más, un par de los miembros de ésta cofradía como
directores de páginas web me dispensan la distinción de publicar semanalmente
mis columnas, lo cual en verdad es una galantería por parte de ellos, por
supuesto que entiendo que lo que en el
chat se escribe es del orden privado y hay
que mantenerlo alejado de lo ventilado, mas no me puedo sustraer a tratar de referir algo así como que los
empresarios que llevan en sus proyectos denominados Soñadores
de gloria, ETMSA y el
tour novilleril que organizó un ganadero norteño han dado más de cien novilladas y no han
sacado un solo novillero.
Más sin embargo remitiéndonos a lo del principio de aquello
de vivir en la distorsión se lee en los medios, medios, que los experimentos
han resultado todo un éxito ¡Si Chucha, cómo no! salvo un rejoneador Joaquín
Gallo, que come aparte por variados y
sustentados motivos que lo han llevado incluso a alternar con Hermoso de
Mendoza y digamos una mano de exponentes y se acabó el brillante show de lo
inexistente y aquí aprovecho pa’ aseverar, que quien puede sustentar mejor que
nadie el éxito o el fracaso lo son; las taquillas, las que en todo caso
deberían de ir en forma ascendente ¡y no lo han ido! Y aquí vendrían varias
preguntas, ¿seguirá interesando la fiesta en México? y entonces ¿Por qué los
novilleros que han presentado, no interesan? Las respuestas pueden ser varias y
variadas, pero seguro ninguna convincente, buena aceptable si volvemos a lo
mismo de tirarnos de maromas en lo inexistente.
Como yo no niego lo existente de mi vejez en el que la
terquedad se hace presente les pregunto ¿sus lecciones interactivas de toreo
infantil?, ¿sus cátedras escolares en las que incluyen la materia de Cuchares?,
¿sus escuelas de tauromaquia las municipales y las privadas?, ¿sus factorías de
hacer novilleros en troqueles?, ¿el convertir la fiesta en concursos tipo
eliminatoria del mundial?, ¿su barra de pregoneros asalariados que expanden las
bondades y los éxitos del certamen?, ¿su novedosa y fresca publicidad donde los
carteles clásicos los metieron al cuarto de los trebejos?, ¿la aceptación de la
anorexia en bravura, edad y trapío?, ¿les ha funcionado?
Y que creen lectores que nos leen en España, eso es en el
renglón novilleril pero en el de alternativas concedidas los últimos diez años,
¡la cosa está peor!