¡Qué muslos tiene mi “Soldado”!
En estos días como
que el Cien brinco a la palestra, con
todo lo que ello implica según apunte la Rosa
de los vientos, la que hizo difunta centenaria apenitas a la Diana Cazadora, que tampoco es su nombre escultórico, el cual es; La Flechadora de las Estrellas del Norte y menos, el
que en vida llevó, quién le diera vida Doña Helvia Martínez Verdayes, quien
escandalizó a la época en todos sentidos y eso que no se ha ahondado mucho en
el hecho legendario que de las caderas pa’ abajo las piernas le pertenecían
paradójicamente a aquel novillero que en sus primigenios le pidió a la empresa
-que lo aguantara un año, por lo raquítico de su físico en aquel entonces- ¿Quién
era el? Pues ni más ni menos que Luis Castro “El Soldado” el nacido en la Av.
de Niño Perdido y al que la revolución
le ha quedado a deber en cuestiones de reconocimientos.
Iniciaron las
festividades al estilo de la High Class del
Centenario de Rancho Seco y se
hicieron como esas telenovelas españolas de larga duración, comenzando con una
tienta V.I.P., luego algo más V.I.P. que fue la presentación de un libro, luego
a taquear Gaoneras no en el lugar original, ni en el que le sigue y en algo
inusual que da hasta que pensar lo cual no hago por los efectos de la Duloxetina y la Cortisona que entre la somnolencia y el alucine me llevaron a
imaginar que la celebración se podría haber esperado más prendida en focos cuando menos pa’ que no quedara en familia la reunión y
animara a aprovechar a tope un encierro mayoritariamente solvente, con el que tres adultos
menores los que lidiaron en 3ro., 5to., 6to. Se vieron envidiosos, al no hacer que los bureles lucieran a
plenitud y el que si merece subrayarse es Diego Sánchez, quién demostró que
cuando se llega a la plaza con percha y elegancia dándole lustre a lo bien
aseado, el arte crece hasta alcanzar lo inconmensurable que por momentos es dónde
raya el toreo de éste adulto menor, ¿o será todavía joven? Y subrayamos esto
porque en el lidiar la edad, sí cuenta, al igual que los años en esto, que no
es lo mismo pues una cosa es acumular hojas en el calendario y otra es poner tu
nombre en el almanaque con letras rojas como aparece lo relevante en los
calendarios.
Lo otro
Rancho Seco -Fermín
Rivera - Agustín Lara
Fue en la calle de Ayuntamiento donde el novillero potosino Fermín Rivera que era muy
asiduo a los billares de esa acera fue
engarzando amistad con el Músico Poeta
Agustín Lara.
Fermín Rivera venía
precedido de trece novilladas de
auténtico triunfador y a la última, que sería
la de la despedida del rango, invitó al maestro Agustín Lara como director y cambiador de suertes en virtud de que en algunas ocasiones en cortito había escuchado al camaleón capitalino y veracruzano tocar la trompeta con singular maestría.
De inmediato Lara acepto hasta con cierta emoción, la cual se diluyo al instante que su secretario “Verduguillo” le recordó que tenían en esa fecha una presentación ya amarrada en Puebla.
El maestro todavía con la emoción que le provocó la invitación le ofreció escribirle un pasodoble al torero, lo cual hizo y estreno en la semana venidera bajo el enunciado de “Novillero”.
Más tarde, en la Alternativa en El Toreo el 8 de diciembre de 1935, con toros de Rancho Seco y el padrinaje del maestro “Armillita” ahí estuvo el amo de los pasosdobles y cuenta la leyenda que esa tarde fue brindado en correspondencia al que le había escrito a Fermín, pieza musical que luego fue comercializada hasta en dos ocasiones pa’ que fuera tema musical en la pantalla de plata, que es donde entra en escena “El Ave de las Tempestades” y con ello se arma una verdadera tempestad de confusiones, las cuales quedaran claras en el momento que en sus manos esté el:
Libro
de Pasosdobles
Es parte de un compendio de lujo, que da pie a invitarle a usted, a deleitarse con la que está predestinada hacer la obra monumental en materia de historia urbana musical del México y la España de oro llevados en compás al cómo y el porqué de los pasosdobles compuestos por el maestro Agustín Lara, así como la vida coloquial de cada torero plasmado en partituras.
Se trata de un libro que anda en la friolera de las trecientas setenta y tantas páginas de la autoría del Bardo de la Taurina, aderezada con más de treinta obras pictóricas específicas a la temática de cada capítulo, todas de la creación del artista Fco. Álvarez y bajo el título de “Embrujo y Fantasía…Historias con Leyendas” el cual será presentado en el Palacio de las Bellas Artes.
Tres suites que lo son la Mexicana, la Española y la de Pasosdobles bajo la producción del propio pintor y escultor Fco. Álvarez, cuyo lujo en edición rebasa lo inimaginable a la par de la colección de pinturas que estarán con los brazos abiertos al mejor postor.